Prueban con éxito en humanos la vacuna contra el Coronavirus

Ver todo el contenido
Las pruebas fueron tan auspiciosas, que en julio se iniciará una segunda fase de pruebas, con muchos más voluntarios, lo que de no mediar sorpresas -que podría haberlas- augura que la vacuna podría comenzar su producción tan pronto como en septiembre.
No es el único proyecto de vacuna bien cimentado. La U. de Oxford (Gran Bretaña) inició en abril la primera fase de ensayos clínicos, con voluntarios sanos de entre 18 y 55 años. Más de más de 1.000 vacunas fueron inyectadas entre los voluntarios, cuyo seguimiento está en curso.
No son los únicos. Según los registros de la Organización Mundial de la Salud (OMS), existen otros seis proyectos que ya iniciaron los ensayos clínicos, de un total de 118 proyectos alrededor del mundo, incluyendo uno chileno.
Robin Robinson, quien fue director de the Biomedical Advanced Research and Development Authority (BARDA), instituto dependiente del Departamento de Salud de Estados Unidos, desde 2008 a 2016 estimo que no habrá una vacuna efectiva hasta la segunda mitad de 2021. Lo más serio que se ha publicado tiene que ver con la decisión del gobierno chino de declarar bien público universal a cualquier vacuna contra el COVID-19 que sea creada en ese país y ofrecer 2 mil millones de dólares en ayuda a los países de menor desarrollo para enfrentar la pandemia es un verdadero jaque a todas las potencias económicas y sanitarias mundiales. Un bien público universal significa que las vacunas de origen chino rechazan el uso de privilegios de patente que, normalmente, se expresan en que los precios de los que primero inventan algún medicamento son entre 30 o 40 veces más caros que el precio que venden el mismo producto dos o tres años después, otorgándoles ganancias impresionantes a los laboratorios farmacéuticos internacionales que, por lo demás, es una de las industrias más concentrada y más lucrativa a nivel mundial. De este modo, la vacuna china que, probablemente, pueda estar disponible antes o muy cerca de la que logren los laboratorios privados, sin duda podrá ser adquirida por los países a un precio muy por debajo de lo que esperan obtener las empresas privadas.
0 comentarios