La Policía Regional sería un ente innecesario, que duplicaría funciones con la Policía Nacional y con Serenzago; mejor que el Gobierno Regional destine recursos a la Policía Nacional y a los Gobiernos Locales para que se implementen mejor en la lucha contra la delincuencia y se pueda adquirir las anheladas cámaras de seguridad.

Los militares pueden participar en el control del orden interno y la seguridad ciudadana, así lo ha señalado el Tribunal Constitucional (STC N° 00022-2011-PI/TC); sin embargo, tendría que evaluarse si los soldados están capacitados para combatir la delincuencia; pues su formación es para la lucha antisubversiva y defensa de nuestras fronteras.

En el país existe crimen organizado (marcas, sicarios, etc), que no va a poder ser combatido sin un sistema de inteligencia capaz de identificar, desarticular y capturar bandas criminales. El Gobierno Central debe re-direccionar el objetivo del servicio de inteligencia, dejando de perseguir y amedrentar a políticos; para centrar esfuerzos en la lucha contra el crimen organizado.